Su traje de nazareno, limpio y bien planchado, gracias a esas madres, esposas, tías, abuelas, hermanas, ellas, que son una parte importante de nuestra Semana Mayor.
En la Junta de Gobierno, las caras son de preocupación, y a su vez de alegría, son caras de nerviosismo, por salir a la calle, ese cosquilleo que te recorre el
Los Priostes, ya casi respiran profundamente, pues un año de trabajo de nuevo se encuentra en la calle, ahora le toca el turno a los Diputados Mayor de Gobierno, quien tienen la responsabilidad de que todo el esfuerzo llegue a buen puerto, y ese puerto es de nuevo como cada año, su Templo, que unas horas atrás los vio salir, esperando pacientemente, para cobijarlos de nuevo durante otro año.
La Cruz de Guía, Senatus, Estandarte, todas las insignias de la Hermandad van entrando p
oco a poco en el Templo, entra el paso del Stmo. Cristo del Amor, a continuación la Cruz Parroquial y el resto de las insignias que acompañan al palio,van entrando poco a poco en el Templo, al final el paso de Ntra. Sra. de las Veredas. Por fin todos en el Templo, la ultima levantá, la ultima chicotá, el ultimo “ahí va a quedar” hasta el año siguiente, una vez que el paso se encuentra en el suelo, todo son abrazos, lagrimas, risas y sobre todo el saber del deber cumplido.
Un año más se ha trabajado para que tu Hermandad, tus Imágenes puedan pasear triunfantes por las calles de Utrera, dando de nuevo una prueba de Amor hacia los hombres.Dedicado a todos aquellos, que trabajan durante todo el año, para que todas las cofradías puedan hacer su Estación de Penitencia. Gracias a ellos, nuestra Semana Santa, cada día es más Grande.






